lunes, 28 de febrero de 2011

Ira y asesinato

Te veo volar, pajaro cobarde, el nido abandonas
y yo grito de dolor, no te importa lo que el alma llora
la sangre podrida de ilusiones que tu, maldito, construiste
Gritare la maldicion de la sepultura
ahogare las penas en cenizas pasadas
y volvere a cantar, moriras en esta condena
no esperes que te salve,
no esperes que te ayude,
tu cadaver surgira desfallecido.

Ahora que, maldito traidor, que esperas?
Pensabas que me ahogaria en tu juego
fallaste una vez mas, no es sencilla golpear
no es sencillo derrumbar un muro con la palabra
Y mucho menos, con la palabra sucia y despiadada
derrogaste mi ley, y mi ser hundiste en el veneno
vomitado por cerdos grotescos de piel clara.

Paso de seguir tu sombra, besar tu culo sucio
tu agonia fria como el hielo, cruel y tramposa
besar tus labios quemados por tabaco usado.
Los tentaculos de tus objetos te arrastran al vacio
manos pegajosas y olorosas gesticulan deseo
y tu narras tus penas lloriqueando hipocritamente

Calla condenado, garras del demonio, esta maldita historia ya es solo una asquerosa parte de un pasado oscuro que no quiero rememorar, hundete ya en este cubo de saliva caliente, bebe la hiel que escupe tu ser y dejame en paz, esta mente inquieta prefiere pensar antes en Belcebu, que tener tu viva imagen de puerco traidor vagando por ella

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